¿Cuánto cobra una inmobiliaria?

Cuando quieres poner en venta una vivienda de tu propiedad, antes o después te planteas la posibilidad de delegar este trabajo en una agencia inmobiliaria.

Cada caso es distinto, hay propietarios que no es la primera vez que se enfrentan a la venta de una vivienda y otros que sí, algunos tienen que vender una vivienda heredada entre varios herederos, en algunos casos no se vive en la misma localidad de la vivienda que se pretende vender, o bien no se tiene tiempo para atender llamadas y visitas, incluso a veces no se confía en que el propietario pueda ser el más indicado para negociar un acuerdo de compraventa de la que es su casa. Pero en todos ellos hay una pregunta muy común, cuando llega el momento de elegir un agente inmobiliario.

¿Cuánto cobra una agencia inmobiliaria?

En España una agencia inmobiliaria cobra una comisión o honorarios de venta comprendidos entre un 3% y un 9% del precio de venta, habitualmente con un mínimo no inferior a 3.000€. No obstante hay diferentes formas de repercutir ese coste de servicio:

• Unas inmobiliarias le cobran sólo al vendedor.
• Otras cobran a vendedor y a comprador.
• Algunas cobran sólo al comprador.

Cualquiera de esas tres fórmulas puede ser lícita si se informa al cliente, en tiempo y en forma, del servicio a desarrollar y del coste repercutido.

En este sentido el vendedor debe asegurarse de lo siguiente antes de contratar a un agente inmobiliario:

• ¿Qué va a hacer la agencia? Esta debería ser siempre la primera pregunta que debe hacerse un cliente. Un vendedor debe asegurarse de la calidad y cantidad de servicios que le va a ofrecer una agencia, debe consultar la reputación de la agencia, informarse sobre ella lo mejor posible e ir a conocer la oficina y al equipo profesional de la empresa con la que firmará un encargo de venta. Esto es lo primero siempre: qué puedes hacer por mí y después hablamos de precio.
• ¿Cuánto y a quién le cobra la agencia? No tiene sentido decirle a un agente inmobiliario: “yo quiero 200.000 por mi casa, lo que tu cobres me da igual”. Una vivienda se venderá o no si su precio está en mercado. Y el precio de mercado lo paga el comprador, que de entrada ya tiene que asumir una carga de gastos por la compra importante, cercana al 10% o incluso superior dependiendo de comunidades autónomas. Si además ese comprador tiene que asumir un 9% de comisión de la inmobiliaria seguramente ya no le parecerá que la casa esté en precio y buscará otras opciones. Un vendedor debe asegurar cuál es el coste repercutido por la agencia, no por el hecho de que una agencia le cobre menos al vendedor será más recomendable, si después le cobra también al comprador. Si una casa cuesta 200.000 y le sumas un 3% de comisión al vendedor y un 3% adicional al comprador, esa casa tendrá un coste para el comprador de 212.000€ más gastos de compraventa, en cambio si una agencia cobra únicamente al vendedor por ejemplo un 4%, el coste de esa casa para el comprador será de 208.000€ ¿entonces qué le interesa más al vendedor desde una perspectiva económica?.
• ¿Qué intereses defenderá el agente inmobiliario? Los intereses de un vendedor y de un comprador son opuestos. Un vendedor contrata a un agente para que le ayude a vender su casa, esperando que su agente le consiga el máximo precio, le evite problemas y molestias. Esto requiere un compromiso, un deber de privacidad, diligencia y confianza fuera de toda duda. En consecuencia debe preguntarle a su agente qué intereses va a poner por delante en todo momento. Y debe reflexionar hasta qué punto el hecho de que su agente o agencia le cobre también honorarios al comprador, ayuda a que se mantenga la confianza y el compromiso de defender los intereses del vendedor en exclusiva.